HABLANDO CON EL CIELO III.

Ya han pasado muchos años, y no me canso de volver a hacerlo. Soy pésimo ocultando cosas.

No estoy bien y no creo estarlo, algo está mal conmigo y está vez quiero repararlo.

En ti nace una estrella, la cortaste de forma perfecta. Alguien cálida para siempre. Estoy camino a la montaña donde están las ganas de todo, enterradas desde hace ya 4 años.

Todo lo que quise fue tu vida.

Muéstrame tu amor sin remordimientos, sube a tu maldito caballito de mar. Esa es la manera en la que quería estar contigo.

Creo que estoy sintiendo más de lo que debería sentir, de todos modos y a final de cuentas lo sienta o no, no está ahí para recibirlo.

y ahora pongo esto bajo el cristal para el loco escrutinio del editor, ha quedado la noche de lado y las lánguidas damas grises se alinean.

Siempre me tienes en tus manos y me lees lo mismo que un libro. Me dices las cosas que no me digo y sabes todo lo que ignoro.

Me aprendo en ti más que en mi mismo, eres como un milagro de todas horas.

El cielo hoy se ve tan azul y recuerdo aquellas tardes en el bosque de la ciudad, pasando tardes dibujando tonterías en mis cuadernos.

Creyendo escuchar tu voz...

Mirando tu fotografía pegada en la puerta y miro tu sonrisa en el cuarto menguante de hoy.

Pregunté a los viejos si hay futuro, y ellos me dijeron ¨estamos muertos por saber¨, la enseñanza siempre fue el no saber por qué.

Y lo más triste es que puedo volver a explicarte cómo eres si alguna vez se te olvida, te conozco tanto que puedo dar clases intensivas de tu vida...

Ya lo dije algunas veces

Todas estas conversaciones internas de cómo envejecer me están poniendo triste cariño.

Cómo a un gato que no quieren y lo meten a una bolsa y lo tiran al río

Esperando a ahogarse.

Descuida cariño, estos últimos meses no me la he pasado tan mal, ya casa no tengo estas caídas muy seguido. Esta es como la segunda o tercera depresión en lo que va desde febrero que te fui a cambiar las rosas.

Sólo espero que llegue el día que recordarte no sea algo que "duela" o simplemente no pueda dejarlo de paso.

Ya no sé si me sobran ganas, o me faltan prisas.

¿Cómo sería aprender? como soñar en las noches que duermes sólo y que el miedo comparte nueva vida



Creí que estos días ya no iban a llegar, pero por fin ha llegado



Pintando paredes que ya no estan



Recordando momentos que no volveran



Imaginando voces que no se podrán escuchar mas



las pruebas de mi paciencia se están agotando y odio cuando estoy así.



¿Me sentiría mejor si cambiara?



¿Será cierto lo que he pensado en el maldito balcón?



¿Me merezco el amor que tengo?



Paso estos días con la cabeza en mis manos

























Comentarios

Fernando Arellano