Amor líquido: visión crítica

Amar.

Abrirle la puerta a ese destino, a la más sublime de las condiciones humanas y al mismo tiempo el acto de debilidad humana más grande, en la que el miedo se funde con el gozo en una aleación indisoluble cuyos elementos ya no pueden separarse. Abrirse a ese destino significa en ultima instancia dar libertad al ser; esa libertad que está encarnada en el otro, el compañero en el amor. 

Bauman explica cómo en las sociedades del capitalismo avanzado aparecen algunas tendencias que afectan a cómo se entienden las relaciones personales: la tendencia al individualismo.

Hace ver las relaciones ¨fuertes¨ como un peligro para los valores de autonomía personal. A esto se une la gran generalización de la ideología consumista que por ende provoca la mercantilización de varios ámbitos de la vida. En este sentido, el resto de personas se tornan números y se empieza a ver como mercancías para satisfacer alguna necesidad, y el amor se convierte en una suerte de consumo mutuo guiado por la racionalidad economicista, donde el ethos económico brinca a invadir las relaciones personales.

El amor de verdad creo nace a partir de esclarecer los deseos internos, dominar el ego y una vez logrado esto podríamos empezar a ver hacia afuera con mucha más claridad y puntería, el amor es una mentira que merece ser vivida.

Estamos en tiempos en los que el consumismo crónico mal fundado que tenemos y la influencia de los entornos de exigencia de placeres inmediatos, nos hacen perder la brújula y olvidar que el amor verdadero se construye y no es como un celular nuevo que solo lo quieres, eliges el color y lo compras, o peor aún, sentir que es un juego de lotería en la que le tienes que andar atinando a un perfil de persona u otro a ver si en una de esas lo encuentras y así como "Ganador de la rifa del amor" esta suerte coloca las posibilidades de 1 entre 1 millón y resulta claro el porqué las relaciones se hacen desechables, tal como cuando compras un billete de lotería y al no resultar ganador ni traer reintegro, al siguiente día ya es inservible y lo desechas.

Parece que el Marketing en los tiempos actuales se apoderó del  concepto de "amor" haciéndolo aspiracional, desechable, fugaz, con caducidad y sobre todo algo frívolo.

Según Sigmund Freud el padre del psicoanálisis, surge a raíz de la infancia, por la ausencia de una o ambas figuras autoritarias (padre y madre), ahí surge la necesidad del querer tener una o múltiples parejas, para suplir esa parte, si seguimos ese enfoque tiene sentido los aspectos psicológicos de los jóvenes de la actualidad, ya que tienden a verse inmersivos en un juego de los estados de ansiedad, frustración y depresión: es la decadencia del amor y mucho tiene que ver el tiempo que se está viviendo por las redes sociales, pero creo viene de uno los atrás, ya que si no ves amor en tu núcleo familiar difícilmente lo vas a reconocer cuando lo encuentres y mucho menos sabrás cómo cuidarlo.

La evolución de un sistema en decadencia; para el amor que encontramos en la verdad de la bondad de vivir alma con alma.

Este amor líquido es sólo el resultado de la decadencia de la humanidad en el sentido de usar y tirar, por que en realidad lo que llamamos amor, es solo la satisfacción de un deseo.

¿Entonces por no comprender qué es solo soy eso? solo un deseo y ya esta, si llamamos las cosas por su nombre no hay por que alarmarnos, pero si quieren vender una idea de amor inexistente es un lío que enreda más los deseos internos.

Amor liquido

¨El consumismo promete algo que no puede cumplir: la felicidad universal. Y pretende resolver el problema de la libertad reduciéndolo a la libertad de consumidor¨